septiembre 20, 2024

Clodomira – Santiago del Estero

¿Es tu pareja emocionalmente impredecible? Por qué el “sí, no, tal vez” es el enemigo oculto de las relaciones


El famoso “que sí, que no” tiene su paralelismo dentro de los vínculos sexoafectivos. Se trata de la disponibilidad afectiva intermitente, algo muy dañino en el universo de las relaciones.

La disponibilidad afectiva tiene que ver con una apertura emocional para una conexión íntima, cercana y franca con otra persona. Es la capacidad y el deseo de sostener un nivel estable de intimidad en una relación. Esa disponibilidad es parte de un proceso interno, personal, que se relaciona con las experiencias previas de la persona y con el estilo de apego que tiene incorporado, explicó a Clarín la psicóloga especialista en terapia de pareja Valeria Bedrossian.

La forma de relación que establecemos, detalló la especialista, responde a una matriz interna: nuestro patrón de apego. “El apego sería la forma de relación que desarrolla cada persona en el plano emocional con sus seres más significativos; algo así como una matriz interna que nos hace proclives a ser seguros, ansiosos, evitativos o intermitentes en nuestra forma de acercamiento a los demás, especialmente en la intimidad”, sostuvo.

El apego y los vínculos

Según la teoría del apego, los estilos de éste desarrollados en la infancia condicionan los vínculos y el comportamiento emocional de las personas en la vida adulta.

Para amar y construir un vínculo sólido es necesaria esa disponibilidad afectiva de un apego seguro. Foto ilustración Shutterstock.Para amar y construir un vínculo sólido es necesaria esa disponibilidad afectiva de un apego seguro. Foto ilustración Shutterstock.

Bedrossian explicó que el apego está relacionado con:

  • El nivel de intimidad/distancia que tendemos a sostener en los vínculos.
  • Cómo gestionamos las emociones.
  • Cómo nos relacionamos con una pareja.
  • La capacidad para comunicar nuestros sentimientos en forma genuina.
  • Cómo nos relacionamos en relaciones íntimas (familia, amigos).
  • Cómo nos afecta la presencia-ausencia de esos otros.
  • Cómo reaccionamos ante la sensación de abandono o rechazo.
  • El estrés que nos generan las relaciones.

Entonces, según esta teoría, “para amar y construir un vínculo sólido es necesaria esa disponibilidad afectiva de un apego seguro y que la misma tenga una continuidad”, dijo la psicóloga.

Y así, “la capacidad de amar, sería, desde esta perspectiva, un privilegio psíquico, el resultado de un apego seguro que nos permite sostener un grado de intimidad sin temores”.

La intermitencia en la expresión afectiva puede hacer que la pareja se sienta desconectada emocionalmente. Foto ilustración Shutterstock.La intermitencia en la expresión afectiva puede hacer que la pareja se sienta desconectada emocionalmente. Foto ilustración Shutterstock.

Los efectos de la disponibilidad afectiva intermitente

¿Qué pasa en una pareja cuando entre los integrantes de la misma hay disponibilidad afectiva, pero es intermitente? “La intermitencia en la expresión afectiva puede hacer que la pareja se sienta desconectada emocionalmente, porque se vuelve imposible mantener una intimidad y armar una base sólida en la relación”, sostuvo la especialista.

Esa intermitencia se transforma en un patrón de comportamiento donde, generalmente, uno de los integrantes de la pareja ofrece señales de comunicación emocional de manera inconsistente o impredecible. Esa dinámica no sigue un patrón regular, sino que es esporádica, lo cual genera gran incertidumbre, es altamente estresante y desestabilizante.

Como consecuencia, lo primero que se pierde en este tipo de dinámicas vinculares es la sensación de confianza y la estabilidad emocional.

Bedrossian aseguró que “el ciclo de incertidumbre/expectativa producido por el modo presencia/ausencia cuando es un patrón recurrente, es ansiógeno y pone al otro en estado de alerta, porque no sabe a qué atenerse”. Además, el efecto sorpresa dado por las reiteradas ausencias ante situaciones que anticipaban mayor intimidad puede provocar un efecto traumático por la gran frustración, vacío y perplejidad que generan en sus parejas.

El modo alerta genera un estado emocional y mental en el que una persona se siente constantemente ansiosa, alterada, en un estado de tensión constante con un alto grado de defensividad que resulta muy desgastante. En ese contexto, se observa:

  • Ansiedad constante: la persona puede experimentar una preocupación continua por el estado y la calidad de la relación.
  • Inseguridad: el modo alerta a menudo está relacionado con sentimientos de inseguridad en la relación, donde la persona teme el rechazo, el abandono o la pérdida de la previsibilidad de la pareja. Esta inseguridad va conformando un sesgo donde todo indicio de parte del otro puede ser leído como amenazante.
El modo alerta genera un estado emocional y mental en el que una persona se siente constantemente ansiosa. Foto ilustración Shutterstock.El modo alerta genera un estado emocional y mental en el que una persona se siente constantemente ansiosa. Foto ilustración Shutterstock.
  • Defensividad y reactividad emocional: debido a este estado de alerta, la persona puede reaccionar de manera exagerada a situaciones que percibe como amenazas a la estabilidad de la relación, como discusiones por pequeñas cosas, desencuentros menores, malentendidos, etc.

Este estado de alerta no es sostenible a largo plazo y puede ser muy perjudicial para la salud emocional y la dinámica de la relación. Puede erosionar la confianza, generar conflictos y crear una atmósfera de tensión constante.

Si ese patrón se vuelve recurrente, tiene grandes riesgos de volverse adictivo, es muy nocivo para la salud emocional y para la dinámica de la relación.

Cuáles son las causas de los problemas en la disponibilidad afectiva

Entre los posibles motivos de los problemas en la disponibilidad afectiva, Valeria Bedrossian mencionó:

  • Problemas de apego: no haber desarrollado seguridad en esa matriz interna de seguridad en los vínculos.
  • Experiencias pasadas traumáticas que generaron miedo a sufrir.
  • Trastornos del narcisismo: las personas con características narcisistas no están en condiciones de proveer emocionalmente al otro, sino que buscan suplemento afectivo y dejan al otro en un estado de carencia.
“Es posible modificar y sanar el modelo de apego", dijo Bedrossian. Foto ilustración Shutterstock.“Es posible modificar y sanar el modelo de apego», dijo Bedrossian. Foto ilustración Shutterstock.
  • Otros trastornos o circunstancias de la vida en los que las personas no están en condiciones de entregarse a una relación afectiva y se desconectan emocionalmente.

Según la psicóloga, “es posible modificar y sanar el modelo de apego si nos implicamos en un trabajo personal para poder acceder a modos de relación que nos permitan disfrutar de la intimidad enriqueciendo nuestras experiencias en los vínculos afectivos”.

Asesoró Valeria Bedrossian, psicóloga especialista en terapia de pareja. En Instagram, @valeria.bedrossian.



Source link